Aquí podréis asistir al diario de nuestras salidas fotográficas. Y como un diario se escribe. Generalmente versan sobre naturaleza, pues es nuestra mayor pasión. Flora y fauna, en la medida que nos permitan sus integrantes fotografiarlas serán incluidas para acompañar al texto. Tampoco desdeñamos monumentos, u otras posibilidades fotográficas con las que podamos encontrarnos. Esperamos que sea de vuestro agrado.

Pinchando en las imágenes se pueden ver más grandes.

martes, 17 de abril de 2012

Pinta bien.

Como cambió el turno Colasina al de mañana, no nos pudimos resistir y volvimos nada más comer para el nido de mirlo acuático. Aunque la riada persiste, está un poco más bajo el nivel y todo sigue bien en el nido, la hembra incuba y el macho aporta lo que puede. Como sólo hay un pequeño espacio donde poner el hide Wili se pone a ver que pasa. El macho enseguida se acostumbra y trae cebo, pero en periodos muy espaciados, y en pequeña cantidad. Es natural, pues el estado del agua impide aún que buceen, pero lo importante es que siga bien, y aunque tengan un ligero retraso, si el estado del río mejora se recuperaran pronto. Más tarde la hembra sale de incubar, al poco rato vuelve, y al ver que está un poco reacia a entrar, recojo todo rápido y me voy, lo de menos son las fotos. Sé por experiencia que en cuanto vea que ya no está el hide allí seguirá sin problemas con su labor.

Mirlo acuático, macho. 

En la especie el dimorfismo sexual sólo se puede evidenciar con el pájaro en mano, en este caso se sabe porque la hembra estaba incubando.

Mirlo acuático, macho.

Mirlo acuático, macho.

Mirlo acuático, macho.
Después de cebar sacó un cúmulo de restos quitinosos expulsados por los pollos que tragó no sin esfuerzos, aquí aún estaba terminando de tragarlos.

En otro orden de cosas vemos que la pareja de gaviotas del tejado sigue estrechando vínculos. Como se ve en las fotos, ella le recrimina, y él, cabizbajo asiente. Vamos casi como en nuestra raza en lo que a relaciones de pareja se refiere... 

Pareja de gaviotas patiamarillas, ella le regaña, y el aguanta el temporal.

El macho, anillado el 20.09.2011, parece estar en perfecto estado a pesar de llevar este nuevo carnet...  

Parece que se van calmando los ánimos.

domingo, 15 de abril de 2012

El invierno llegó.

Recordamos una conversación de hace tiempo con un lugareño de Caso, de estos a los que estarías horas escuchando, y de los pocos por esos lares a los que a pesar de tener reses por el monte estaba en contra de matar lobos y demás "alimañas", en una ocasión en que el invierno parecía no haber tenido lugar como viene siendo habitual estos años, él nos dijo una vez: rapaz, el invierno no lu comen los llobos. Pues bien, eso es lo que acontece ahora en Asturias, el invierno llegó, chubascos, nieve en los montes y "frío", que hacen honor a lo que nos decía Marino años atrás.

Después de una semana santa pasada por agua, esta casi terminada no le fue a la zaga.
El jueves 12. Como la Colasina tiene turno de tarde esta semana, voy (Wili) al Parque Isabel con un tiempo que tan pronto hace un poco de sol, como está con nubes negras. Está el morito comiendo a destajo muy cerca, tanto, que a pesar de llevar sólo el 70-200, a veces no entra en la foto. Por experiencia con él en el sur sé que es difícil de fotografiar, tanto por lo inquieto que es cuando está buscando comida, como por el plumaje tan conflictivo para el fotómetro. Por ello, al contrario que con otras especies, cuando hay un rayo de sol estoy deseando que se nuble para tener la luz más uniforme, y no quede el plumaje muy oscuro.
Las garcetas comunes tiene al menos dos nidos, y uno de la pareja se afana a veces en recolectar ramitas para llevarlas al que está incubando, que cuidadosamente coloca a su gusto. La Gallineta que hace un tiempo vimos construyendo el nido ya lo tiene terminado, y en ese momento uno hace guardia, mientras el otro incuba ya, está en una zona muy tupida para foto, sin embargo "muy fácil" para la garduña, que es asidua nocturna del parque. En ese mismo lugar lo hizo una tórtola turca hace un par de años.

Morito.

Morito.

Morito.

Morito, bebiendo.

Disputas espaciales entre gaviotas, estuvo un buen rato grapándola, y la otra chillando para que la soltase.

Esta no se llevaba bien con nadie, aquí el aviso...

Y aquí el picotazo.

Garceta común cogiendo ramas para el nido.

Morito, estiramientos.

Sábado 14.
Como la Colasina trabajó de mañana, después de comer, y a pesar del mal tiempo vamos a ver el nido de mirlo acuático al que ya llevó una riada el primer nido de la temporada. Este nuevo, le tenemos controlado incluso el primer día de puesta, lo que permite hacer un seguimiento muy fiable sobre el nacimiento y estado de los pollos. Tenían que tener pollos pequeños, (de 5 ó 6 días) y aunque hoy no se puede mirar el nido, lo que nos preocupa es que el nivel de cauce por las lluvias que están cayendo siga en aumento, pues está a sólo unos 50 cms del nido. Además hacemos un seguimiento a distancia a ver el tipo de cebo que aportan, y como era de esperar, estas riadas les están retrasando, pues las capturas son mínimas. Con el estado del río no pueden bucear, y tienen que procurar cebas a expensas de lo que logren recolectar por las márgenes del cauce, que es bien poco por el tiempo tan adverso que tienen.  

Así estaba el río justo hace un mes, 14.03, cuando estaban terminando el nido. 1

Así estaba el río justo un mes después, 14.04. Y lo malo es que siguen aún las fuertes lluvias. 2

El árbol acodado da idea de la diferencia de altura del cauce, 14.03. Detalle del círculo de la foto 1.

Hoy 14.04, el agua casi roza el árbol acodado. Detalle del círculo de la foto 2.

Mirlo acuático.
Aunque este nido es de hace tiempo lo ponemos como homenaje a esta pareja que tiene pendiente de un hilo que su segunda puesta lo consiga, ojalá cambie el tiempo pronto. Este nido de la foto es el único de los muchos que seguimos en los 80 y 90 del pasado siglo a la especie, y que no tienen bóveda superior. Es en una cueva, y al estar ubicado en una grieta con bóveda natural, prescindieron de hacerla con musgo como es costumbre. 

martes, 10 de abril de 2012

Malditos bastardos.

El viernes Colasina trabajó, y entre eso y el mal tiempo, esta semana santa pasó sin pena ni gloria.
El sábado 7, a pesar de seguir las lluvias, como dan mejoría para esta tarde nos vamos para la zona de Muniellos, en concreto a Vegaltallu. Hace muchos años que estuvimos en una mina abandonada donde encontramos a la escasa salamandra rabilarga, y con la intención de rencontrarla, para allá nos vamos. El trayecto entre agua y niebla sin parar, hace que a veces nos planteemos si no estaríamos mejor en casa. Pasada Cangas de Narcea desayunamos en la panadería de Penlés como hacemos siempre que venimos por aquí. Después seguimos a Vegaltallu y nos instalamos en el alto del Forcau. A media tarde deja de llover, aunque persiste la niebla. Vamos a dar un paseo por la pista que nos conduce a la mina, o eso creíamos, pero no la encontramos. Pensamos que entre lo que nos falla la memoria, (pues hace ya unos 15 años que habíamos estado), o que está el sendero tomado y no le avistamos, volvemos sin resultados. Al menos deja de llover, y al oscurecer se van abriendo claros. Por este alto no pasa ni un alma en toda la noche, y dormimos muy tranquilos.

Este aspecto tenía el valle de Vegaltallu, con la niebla no se veían los montes.

Domingo 8.03.
Amanece despejado y con una helada de órdago. En el camper el termómetro marca 2º, así que afuera estará bajo cero. Nos levantamos antes de las 8, y tras tomar algo caliente salimos a caminar, que es como mejor se combate el frío. Vamos por un camino enfrente de la pista que va a la mina, por el que el Wili transitó hace unos años con motivo de la colaboración en el ultimo censo de urogallo que se realizó en la zona. Vemos muchos rastros de mustélidos, excrementos sobre todo, también de arcea (Chocha perdiz), vemos una ardilla pero ni un rastro de lo que vamos buscando.  Es una zona muy virgen, no en vano está pegada a la reserva integral de Muniellos. Lo que no veíamos ayer por la niebla es que todos los montes de enfrente están calcinados por algunos de los más de 300 incendios que asolaron miles de Has por toda la geografía del Principado.

Todo el cordal del W de Vagaltallu quemado. Al fondo, a la izqda de la niebla, aunque no se aprecia casi en la foto también están quemados varios montes.

Algunos robledales en medio del desolado paisaje quedaron como pequeños bosques isla.

Vegaltallu.

Desde el alto del Forcau se aprecia el corazón del bosque de Muniellos; por suerte intacto.  

Lo de los montes quemados es una cosa que nos supera, ver el estado tan dramático y grotesco que queda después del fuego es una mezcla de tristeza, rabia e impotencia que nos obliga a pensar en lo que haríamos con los responsables de tales actos. Se insiste mucho en los medios sobre los incendios, pero no se valoran siempre los verdaderos y dramáticos resultados tras los siniestros. No sólo es la vegetación de incalculable valor, el gasto monetario, el gasto de agua; a veces nos olvidamos de los miles de insectos, reptiles, anfibios, mamíferos y hasta aves que mueren en los incendios. Es un panorama desolador que te acongoja sobremanera, sobretodo cuando lo ves desde una ladera llena de vida vegetal y te imaginas que así estaría la de enfrente antes de estos actos vandálicos. Recordamos también como estos días gente lloraban porque a un trozo de madera no podían sacarle a pasear: Esto si que es para llorar, pero así es el "homo sapiens".
No encontramos a la salamandra rabilarga, especie endémica de la franja occidental de la península, es decir, que sólo habita la zona occidental de Asturias, Galicia y algo del Norte de Portugal; en el resto del planeta no existe. De buen seguro que en estos incendios, han perecido muchas. Tras el mal cuerpo que nos deja el panorama, y el cansancio que ya traemos, no volvemos a intentar encontrar la mina como teníamos pensado hacer. Salimos por el puerto del Connio a Ibias.

Los montes de gran parte de Ibias están si vegetación arbórea por la sistemática quema a que son sometidos año tras año.

Ibias es uno de los concejos asturianos donde más incendios se producen todos los años, y los montes del concejo- sobre todo en las zonas altas- están desnudos y sin arbolado. Seguimos al Pozo de las Mujeres Muertas donde paramos a comer. Después bajamos por Monasterio de Coto con algunos montes también chamuscados.

Cerca de Monasterio de Coto, otro panorama desolador.

Para colmo en Pilotuerto vemos una marta atropellada, y ayer al pasar no estaba, lo que indica que fue esta noche el atropello. En el embalse de la Barca también están las laderas quemadas.

Laderas junto el embalse de la Barca.

Volvemos para casa un tanto desmoralizados, no tanto por no encontrar la salamandra, como por el panorama desolador de los montes calcinados. Estos vándalos pirómanos que tendrán dentro de sus míseros cerebros. Una pena.

Aunque esta vez no la encontramos ponemos esta larva de salamandra rabilarga.

martes, 3 de abril de 2012

Picapinos, la joya de este finde.

Viernes 30.03.
De vuelta a nuestro paraíso particular. Llegamos sobre las cinco de la tarde, y el tiempo como viene siendo últimamente: veraniego. Nada más descargar todo, y mientras montamos el hide nos pasa un zorro por delante a corta distancia que ni nos mira, el equipo aún en las mochilas claro. Vemos que los picapinos comieron todas las avellanas que colocamos, así que parece que está aquerenciado por la zona, y de hecho, le sentimos enseguida tamborilear muy cerca, y poco después viene el macho a ver si "brotaron" más avellanas, y como ya habíamos colocado más se pone a comerlas. Los demás visitantes se les ve muy enamorados ya, todos vuelan emparejados a comer, e incluso el petirrojo ya tiene pareja, y acuden los dos en ocasiones a comer.

Sábado 31.03.
Amanece despejado, y al levantarnos con el alba ya sentimos picar al picapinos en las avellanas, también pusimos una nuez en una hendidura apropiada de la que da buena cuenta. Sobre las 8.30 baja el Wili a buscar a Abel y Elena que hoy nos visitan. Al bajar le sale una pareja de corzos delante del Suzuki en el camino, cerca de la loma, quizás la misma fotografiada hace poco. Nada más llegar vamos todos a dar una vuelta por el Coto donde vemos un par de venadas. Ya de vuelta entran al hide Colasina y Abel, mientras Wili va trabajando por el nuevo hide. Elena toma el sol en La Gorina. Sobre las 15 horas les entran los dos picapinos a la vez, es decir, la pareja. El pinzón, los páridos y trepadores lo hacen también a ratos.

Pico picapinos, pareja.

Pico picapinos, hembra.

Pico picapinos, macho.

Pico picapinos, hembra.

Trepador azul, macho.

Petirrojo.

Carbonero común, macho.

Carbonero garrapinos,

Carbonero palustre, con exhibición de cortejo.

Herrerillo capuchino.

Herrerillo común.

Pinzón vulgar, macho.

Domingo 01.04.
Amanece igual que ayer de despejado. Pasamos la mañana trabajando por el nuevo hide, pues tenemos comprobado que la luz de la mañana no es la mejor para el comedero, y no merece la pena. Cada poco sentimos a los picapinos picar las avellanas.
Después de comer cuando la luz ya es mejor nos metemos al hide y el picapinos macho nos da un recital, pues aparte de comer la nuez y las avellanas no para de mirarlo todo a corta distancia del hide, los demás como siempre, y los páridos con actitudes amorosas para con sus parejas, se palpa la nidificación en el ambiente. 

Herrerillo capuchino.

Herrerillo capuchino.

Pinzón vulgar, macho.

Herrerillo común, con exhibición de cortejo.

Petirrojo.

Pico picapinos, hembra. 

Pico picapinos, macho.

Pico picapinos, macho.

Pico picapinos, macho.


Pico picapinos, macho.

Al final de la tarde regresamos. Llegamos a Gijón con el cielo cubierto, ¡con el sol que hacía allá!