Los milagros no existen.

Viernes 17.
Salimos después de comer hacia Zamora, a la comarca de Aliste.  El nido del mirlo encontrado en la anterior visita, hacía que fuésemos expectantes, pues nos parecía milagroso que se lograse, dado el lugar y las condiciones del sitio donde le asentaron. Al llegar comprobamos lo que ya nos temíamos, que el nido se había malogrado. No es la primera vez que encontramos nidos  de esta u otras especies ubicados en lugares que ya de antemano se vislumbra poco futuro para que llegue a buen término, pero este se llevaba la palma. Al salir para ir a dormir a un pueblo cercano, vemos un macho de collalba rubia, que en esta zona es la primera vez que la observamos. Antes de Fradellos vemos el mochuelo en la zona de otras veces y nos cercamos con el furgón, pero esta vez se esconde entre las piedras.

Al atardecer cerca del pueblo donde dormimos, la luz daba este tono dorado al cereal.

Sábado 18.
Nos levantamos al amanecer con el cielo despejado y una temperatura bastantes fresca por la helada. Vamos a donde ayer vimos la collalba rubia, y acercamos con el furgón a la zona donde la vemos posarse asiduamente, para desde la ventanilla intentar hacerle algunas fotos, después de hacerle unas fotos en un par de posaderos vemos que se va con cebo cerca de donde estamos y entra a cebar muy cerca del suelo, también acude a la vez la hembra; por el tamaño del cebo, y por quedarse ella a incubar sabemos que tiene los pollos muy pequeños, así que nos vamos para no molestar, y volver cuando los pollos estén en condiciones de termorregulación.

Al salir del pueblo donde pernoctamos, con las primeras luces (6.28 am), estas tórtolas comunes y el cereal presentaban este tono dorado. 

Collalba rubia, macho. Zamora.

Collalba rubia, macho. Zamora.

Después vamos una colonia cercana de abejarucos, y no hay ocupación este año, también comprobamos que hay menos oropéndolas, y menos alcaudones comunes que en años pasados. Vemos una pareja de ruiseñores comunes con 5 pollos volantones. Hacemos algunas flores y fotos al río Cebal.

Más tarde iniciamos el regreso, y paramos en la colonia de gorriones molineros. Comemos con el portón entreabierto y la red de camuflaje, frente a un nido que los adultos no paran de cebar.

Digitalis. Zamora.

Araña cangrejo sp en digitalis. Zamora.

Gorrión molinero. Zamora.

Gorrión molinero. Zamora.

Gorrión molinero. Zamora.

De allí venimos para la comarca de la ribera en León. Los abejarucos ya ceban, pero lo dejamos pues aparece gente y nos vamos para no delatar los nidos. Habíamos mirado al llegar la zara donde los alcaudones dorsirrojos entraban con material la vez anterior y vemos que el nido está destruido, y por lo deteriorado que está parece obra del armiño que vimos muy cerca de él.

Recalamos para dormir en Barrios de Luna.

Domingo 19.

Nos levantamos al amanecer, y vamos mirando las zonas que conocemos bien. Paramos en una a desayunar, y mientras lo hacemos vemos unas currucas zarceras con cebo que entran cerca de donde estamos. Así que después de desayunar nos ponemos con las sillas-hide frente al arbusto seco que utilizan como posadero de entrada. No paran de cebar nada más que a acicalarse de vez en cuando, y lo hacen en el mismo arbusto seco, sin importunarles para nada la presencia de nuestras sillas. Pasamos gran parte de la mañana disfrutando del cotidiano quehacer de las zarceras, que ahora no es otro que alimentar a la progenie que tiene en el nido, no miramos cuantos tiene, pero estos pájaros habitualmente tienen 4 pollos por puesta. Después hacemos a un ratonero que deambula por la zona muy cerca de nosotros. Terminamos junto a un pilón que alberga bastantes escarabajos acuáticos, y al que vienen grana cantidad de avispas a beber, también hacemos algunas flores de la zona.

Curruca zarcera. León.

Curruca zarcera. León.

Curruca zarcera. León.

Curruca zarcera. León.

Ratonero común. León.

Ratonero común. León.

Zigena ¿?. León.

Avispa. León

Clavelina sp. León.

Clavelina sp. León.



A media tarde volvemos para casa por el puerto de Ventana, cruzando el fresco hayedo que acompaña durante todo el descenso.

El lunes 20. Wili se fue a la cabaña de Redes con el amigo Pablo, y Esteban Guerra, a este último le pudo poner cara, pues como seguidor de su blog hacía tiempo que tenía ganas de conocerlo en persona, y  fue un placer estar tan bien acompañado, y con un día de sol expléndido. Lo único negativo de la jornada: los lirones no quisieron conocerlos, y no se asomaron para vernos.