Los asiduos quizás se acuerden como
finalizamos las vacaciones de 2011. En aquella ocasión no pudimos realizar la ruta a la fuente del cobre, por un problema que venía arrastrando Wili, y que le impedía realizar caminatas aunque fuesen cortas. Ahora que por suerte ya no tiene este problema, decidimos ir a terminar esta ruta, pues nos habíamos quedado con las ganas.
Viernes 13.01.
Después de salir Colasina de currar y de comer nos vamos por la Autovía del Cantábrico. Entramos en La Villa a echar un breve vistazo al Cierrón, y vemos una espátula, que suponemos es la que lleva por aquí una temporada.
Espátula. El Cierrón, La Villa.
Continuamos hacia Llanes, y Unquera, desde donde tras comprar las obligadas corbatas, seguimos por Pesués, y Puentenansa, hasta el puerto de Piedrasluengas, para poco después de Arengos, ya en Palencia, meternos hacia Tremaya, y finalizar en San Juan de Redondo. Esta vez aparcamos el camper en una explanada a la entrada del pueblo. Llegamos justo al oscurecer, así que para hacer tiempo hasta la cena vemos una peli muy clásica: Gilda. Dada la ausencia de tráfico, o ruidos, dormimos plácidamente, además apenas heló.
Sábado 14.01.
Al amanecer salimos para el cercano pueblo de Santa María de Redondo, y desayunamos en el amplio aparcamiento desde donde parte la ruta al nacimiento del río Pisuerga, denominada: Fuente del Cobre. Es una ruta bien señalizada, que discurre en casi todo el trayecto con el río cerca. Casi no hubo helada, pero se nota que los días anteriores si que hubo temperaturas de varios grados bajo cero, como lo atestiguan las grandes lenguas de hielo que cubren por completo el camino en las zonas de umbría, y también los enormes carámbanos en las piedras, y ramas del río. Se cruzan varias manchas de robledal y grupos de acebos muy espesos y en muy buen estado. Vemos gran cantidad de pájaros, sobre todo páridos, trepadores, y pícidos. También vemos muchos rastros en forma de excrementos de mamíferos como, lobo, zorro, y mustélidos.
Según reza en los carteles son 5 kms, que se hacen muy cortos, por lo relajados que los realizamos.
La ruta finaliza en una cueva por donde mana el río Pisuerga, que nace un poco más arriba, en la vertiente norte del pico Valdecebollas. Como hacemos habitualmente, subimos sin apenas parar, mirando las posibles fotos, para a la vuelta, ya con calma, plasmarlas en la tarjeta. Por esta razón, la vuelta nos lleva bastante más que la ida, pero aun así, lo hacemos en poco menos de 5 horas.
Al llegar de nuevo al camper comemos, y a continuación partimos de regreso, pero esta vez, bajamos por el puerto de Valdeprado, y terminamos en el pueblo de la Hermida, donde en el tranquilo aparcamiento de la salida, junto al río Deva, nos instalamos para pasar la noche.
Cueva donde mana el río Pisuerga.
Cueva donde mana el río Pisuerga.
Interior de la Cueva del Cobre, a la izqda, por la zona oscura discurre el río.
A pocos mts de la Cueva del Cobre, el caudal, aún es mínimo.
Sendero a mitad del recorrido.
Sendero atravesando un espeso acebal.
La primera parte del recorrido es una pista ancha.
Vistas desde el sendero.
Río Pisuerga unos 3 kms más abajo de la cueva, ya lleva más caudal.
El camino presentaba estas placas de hielo en gran parte de las zonas bajas del recorrido.
Formaciones de hielo en las hojas de la hierba.
Valle de Santa María de Redondo.
Todo el río en las zonas de umbría presentaba grandes carámbanos.
Cartel indicador de la ruta, en el aparcamiento de Santa María de Redondo.
Domingo 15.01.
No madrugamos mucho pues no tenemos prisa. Amanece cubierto, y durante la noche cayeron algunas gotas. Partimos rumbo a Panes, y paramos en este pueblo a desayunar en un gran aparcamiento que hay a la entrada del pueblo. Después venimos por Cabrales para terminar en Infiesto donde vamos a ver como está el nido de mirlo acuático. Vemos que el nido viejo del año pasado ya tiene material nuevo dentro, lo que indica que ya le están construyendo. El año pasado al final se nos olvidó ir después de ver que le estaba construyendo, pero este año no lo dejaremos pasar que ya tenemos ganas de hacer algo nuevo de mirlo acuático. Al menos nos alegra saber que el nido está en su sitio, lo que indica que consiguió criar con éxito.
Río Cares cerca de Arenas de Cabrales.
A pesar del mal tiempo que se avecina, siempre sorprende la mole del Urriellu desde Poó de Cabrales.
Después vamos a comer a un parque cercano, y vemos que en unos Aligustres (
Gracias a Félix por
clasificarlos), árboles que tienen racimos de bayas negras, hay varias decenas de camachuelos que comen vorazmente las bayas. Es increíble la querencia que tienen, pues si algo les espanta, al poco rato están de vuelta. Sabiendo sus costumbres todo indica que estarán por la zona hasta que acaben todas las bayas, lo que les llevará de seguro varios días. Nosotros desde la ventanilla no paramos de hacerles fotos, a unos 5 ó 6 mts la mayor de las veces. Hacía mucho que no veíamos tal cantidad de camachuelos.
Mirlo acuático en vuelo. Infiesto. Piloña.
Camachuelo macho. Infiesto. Piloña.
Camachuelo macho. Infiesto. Piloña.
Camachuelo macho. Infiesto. Piloña.
Camachuelo hembra. Infiesto. Piloña.
Camachuelo macho. Infiesto. Piloña.
A media tarde les dejamos para regresar a casa ya lloviendo.